Amalia Campo: «La psicología está en todos los ámbitos de la vida»
Entrevista en El Correo Gallego a Amalia Campo Fernández, coordinadora de Son Capaces, o proxecto de integración de Syc-Applus.
¿El hecho de ser mujer limitó o perjudicó en algún momento sus relaciones laborales o su promoción profesional?
Vivimos épocas de turbulencias ¿qué se puede hacer para que el horizonte se despeje?
Creer en lo que uno hace y trabaja, y tener mucho sentido común y ética profesional. Plantear objetivos realistas. A día de hoy, hay muchas más posibilidades en el sector que cuando yo terminé mis estudios y me iniciaba en mi profesión. La psicología está en todos los ámbitos de la vida. Tienes que descubrir donde tú puedas realizarte como profesional y aportar más valor. La sociedad ha evolucionado mucho, ya no vivimos en una sociedad tan machista como antaño, ahora hay más apertura a la introspección y tratar con normalidad planos emocionales que antes se evitaban abordar. La profesión tiene mucho más reconocimiento, cosa que se ha alcanzado antes en América que en Europa.
Pues sí, empezando por los valores familiares y terminando por gente que cree en ti y en tus proyectos. Todo ello te ayuda a crecer en los trabajos. Personalmente, me he ido encontrando a lo largo de mi trayectoria profesional con personas que han creído en mí y me han dado oportunidades profesionales.
¿La vocación por los estudios o el trabajo ha surgido desde edad temprana o se consolidó cuando tenía formación académica o había vivido experiencias distintas?
Ya desde edades tempranas tenía claro que mi profesión sería dedicarme a los demás y luego fue determinante en mi toma de decisión, un familiar mío psicólogo de profesión, con el que tuve la suerte de formarme desde el inicio de mis estudios.
¿Qué concepto tiene del papel de la familia?
La familia lo es todo en tu desarrollo como persona, en la elección de tu pareja, los hijos…. Todo influye, pero lo fundamental es creer en los valores que te han transmitido, que tú has hecho tuyos y tratas de vivir y de expresar en las cosas que haces y diriges.
Aquí, en mi caso, los valores pasados transmitidos por mis padres y, posteriormente, por los jesuitas y, en la actualidad, por mi voluntariado en el Santuario de Lourdes, me generan e inspiran, un estar ante el mundo y las dificultades, de una manera sincera y realista y, a pesar de todo, me recuerdan que la vida es bella.
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